Breve reseña de las artes cinematográficas de la isla de Cuba

el cine en cuba

Cuba siempre ha despuntado en el Caribe por su potente cultura. Su literatura y música resuenan en toda América Latina y llegan a influenciar a algunos autores españoles. El cine no es menos que los otros dos artes y te sorprenderá saber que esta isla lo lleva muy adentro. En esta entrada hablamos del arranque del cine cubano.

Inicios del cine cubano

El 13 de febrero de 1895 los hermanos Lumière patentaban su cinematógrafo y a finales de año realizaban la primera exhibición al público. El cine había nacido. Desde entonces hasta nuestros días se han rodado incontables películas y el séptimo arte se ha consolidado como uno de los mayores entretenimientos. Cuba no tuvo que esperar mucho para disfrutar de este invento.

Los hermanos Lumière tenían a la isla en el punto de mira de la expansión de su naciente negocio. Así, en 1897 Gabriel Veyre, un ciudadano de origen francés, llevó el primer cinematógrafo a la isla desde México. Aún no contaban con las superproducciones modernas, pero los cubanos de la época pudieron presenciar cuatro cortometrajes: Partida de cartas, El tren, El regador y el muchacho y El sombrero cómico.

El pase se realizó en el Paseo del Prado n.º 126, al lado del hoy conocido como Gran Teatro de La Habana, aunque por aquel entonces se llemaba teatro Tacón. Las entradas costaban 50 centavos para el público general y 20 para niños y militares. El espectáculo causó furor y pronto proliferaron los teatros con cinematógrafo. De hecho, la primera película cubana fue rodada por Veyre. Se llamaba Simulacro de incendio y era un documental sobre los bomberos de la isla.

Sin embargo, la primera cinta rodada por un cubano fue un anuncio para una cervecera. Enrique Díaz Quesada es considerado como el primer cineasta cubano, quien empezó su trayectoria en 1906. Este cineasta dominaba el lenguaje del cine de la época a la perfección, apostaba por la veracidad y el dinamismo de la realidad. De él conservamos la cinta promocional El parque de Palatino, la cual buscaba promocionar y retratar este parque tal cual era.

El propio Quesada rodaría las primeras películas de ficción cubanas. Manuel García o El Rey de los campos de Cuba (1913), La manigua o La mujer cubana (1915) y El rescate del Brigadier Sanguily (1916) son algunas de ellas. Sin embargo, a principios del siglo XX fue el cine documental el que encandilaba a los cubanos y que era patrocinado por numerosos amantes de este incipiente arte.


 

La cultura de cuba siempre ha apostado por el cine. Desde sus primeros pasos hasta la actualidad ha reflejado la realidad de la isla como pocos medios. Aún a día de hoy cuenta con exponentes de renombre y ejerce una cierta influencia en el panorama internacional.

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