José Raúl Fraguela (Pinar del Río, Cuba, 1961). Poeta y escritor para niños. Su obra para niños refleja lo vivencial, en regodeo lírico con los elementos de la naturaleza, las relaciones familiares y sociales. Se graduó de ingeniero agrónomo en la Universidad Hermanos Saíz de Pinar del Río en 1983. Colaborador del Centro Provincial de Superación...
José Raúl Fraguela (Pinar del Río, Cuba, 1961). Poeta y escritor para niños. Su obra para niños refleja lo vivencial, en regodeo lírico con los elementos de la naturaleza, las relaciones familiares y sociales. Se graduó de ingeniero agrónomo en la Universidad Hermanos Saíz de Pinar del Río en 1983. Colaborador del Centro Provincial de Superación para la Cultura, ha desarrollado una amplia labor como promotor literario a través de postgrados, cursos, conferencias y talleres sobre temas editoriales y literarios. Se han publicado trece ediciones de sus libros y aparecen textos suyos en varias antologías y publicaciones seriadas nacionales y de México, Estados Unidos y El Salvador. Entre sus publicaciones se encuentran: Espiral del tiempo (Ediciones Loynaz, 2001), Ronda la ronda (Ediciones Loynaz, 2005 y 2009); Otro elefante en otra cuerda floja, (Ediciones Unión , 2008); Navegas, isla de oro, (Editorial Gente Nueva, 2009); Esta cárcel de aire puro (T II), (Casa Editora Abril, 2010); y su cuento Tía Ninfa aparece en la antología Vuelve a cantar la cigarra (Editorial Gente Nueva, 2012) entre otros.
El Frague, como muchos le dicen, es uno de los rostros más sonrientes de nuestra LIJ actual. Este pinareño radicado en Guantánamo encuentra en la literatura un complemento para su vida, un modo de expresar a la infancia el amor por lo cotidiano, de mostrar la belleza que está ante nuestros ojos, a cada paso, agazapada como esas mariposas que se enmascaran con los colores del paisaje. Su poesía, a veces más naif, otras más llena de significados y que en su libro más reciente (El del espejo… ¿soy yo?, publicado por Gente Nueva) ya lo demuestra asumiendo un carácter de fábula, contándonos de un hipopótamo que enamora por Internet o de una mona que sueña viajar el mundo, de una caimana en busca de esposo o de un gallo enamoradizo, personajes tomados de la realidad con una visión satírica y lograda, la mejor evidencia de que este creador, inquieto e insatisfecho como todos los de su generación, en cada nueva obra gana un paso más en la difícil y riesgosa carrera a distancia que significa llegar al corazón de los niños.