Reinaldo Arenas: Cómo ser Escritor Cubano y Homosexual.

escritor cubano

En 1983 me entrevisté con el escritor cubano Reinaldo Arenas en Princeton. Recuerdo ese día con un toque de olor a madera en el aire y una pálida luz del otoño en los árboles desnudos mientras iba andando por el campus para encontrarme con el escritor.

Yo estaba escribiendo mi tesis sobre la obra de Arenas y la traducción de algunas de sus obras de ficción. Mi traducción de su novela La vieja Rosa fue más tarde publicado por Grove. En diciembre de 1990 el escritor cubano Arenas – muriendo de SIDA – se suicidó. Cuando ya se han cumplido más de 20 años desde que publicó su impresionante libro de memorias, Antes que anochezca. El libro cubano fue llevado al cine con el mismo nombre, la película fue dirigida por Julián Schnabel y protagonizada por Javier Bardem.

Nacido en 1943 en una pequeña granja de Cuba, Arenas consiguió la mayoría de edad durante la Revolución. Se unió a Castro cuando no era más que un adolescente, pero creció desencantado y más tarde desesperado. Perseguido por ser homosexual y por publicar en el extranjero, fue detenido varias veces y encarcelado durante dos años en la cárcel medieval de El Morro. Liberado en 1976 fue a la deriva, a veces en casas de amigos y escribió Adiós a la Mar por tercera vez, (La policía había confiscado las dos anteriores). Durante este periodo la periodista venezolana Cristina Guzmán siguió a Arenas en la Habana vieja. En una entrevista publicada en 1979 en el periódico El Diario de Caracas, escribió “fui toda la tarde buscándolo, hasta que en la entrada de un antiguo hotel convertido en una residencia permanente para unos cuantos cubanos una mujer le contesta “Reynaldo…Arenas… un tipo que escribe?

La fortuna del escritor cubano Arenas cambió 1980 cuando miles de personas irrumpieron en la embajada de Perú en LA Habana en busca de asilo político. Castro reprimió a los solicitantes de asilo y aprovechó la oportunidad para dejar que los elementos antisociales como criminales, enfermos mentales y homosexuales salieran del país. Arenas fue a su comisaría de barrio y dijo que era gay. Y la policía sin reconocer al escritor cubano le dijo que acudiera a casa y esperara para recibir el permiso de salida hasta Florida desde el puerto de Mariel.

Una noche ese permiso llegó con solo media hora de margen para para llegar al punto de salida. Arenas se preparó para el autobús y le ofrece al conductor una cadena de oro para que se dé la mayor prisa posible. Dejando pasar todas las paradas, el conductor pudo dejarlo a tiempo.

Durante sus largos años de sufrimiento en Cuba, Este escritor cubano siempre había soñado con escapar, de dejar atrás “la tierra de los horrores” y por fin la vida en libertad. Pero el exilio trajo una forma diferente de cárcel. En Antes que anochezca, Arenas escribe “En el exilio no eres nada más que un fantasma…he dejado de existir cuando fui al exilio”.

Los intelectuales de izquierdas que lo admiraban cuando estaba en Cuba se volvieron contra él. “Descubrí una nueva criatura desconocida hasta ahora en Cuba: El Comunista Deluxe. Recuerdo que en un banquete en la Universidad de Harvard un profesor alemán me dijo: ‘Puedo entender de alguna manera lo que has podido sufrir en Cuba, pero soy un gran admirador de Castro y estoy muy contento con lo que está haciendo en Cuba. ‘”

La editorial mejicana de Arenas le dijo que no debería haberse ido y su editor en Uruguay también opinaba lo mismo, que fueran cuales fueran los problemas que había tenido en Cuba eran meramente “Burocráticos”. El escritor cubano encontró la comunidad de exiliados como lo peor de Cuba: El chismorreo eterno, la argucia, la envidia”. Después de unos meses se trasladó a Nueva York y vivía en un sexto piso en Hell’s Kitchen sin teléfono.

En la última entrevista al escritor cubano publicada en Review: Literatura y Arte de las Américas, Arenas dijo a la  profesora de español de la Universidad de Columbia Perla Rosencvaig “Tal vez en un futuro un escritor mío diga: ‘Cómo sufrieron estas personas! Qué mundo les tocó vivir, qué pena sentimos por ellos!’” Releyendo las memorias de Arenas este año sentí todo esto de nuevo. Los amigos a veces le decían a Arenas que se olvidara de lo que había pasado en Cuba, pero nunca quiso o pudo.

Quizá sea que el escritor cubano, además, se aferra a ello para darle sentido a la realidad, de que él buscó pero nunca encontró los EEUU.

En Antes que Anochezca, El escritor cubano escribe acerca de su terrible sufrimiento pero también describe momentos de gran felicidad. Le encantaba el mar y en sus veinte años se convirtió en un “nadador experto” . Él escribe “fue maravilloso bucear y contemplar el mundo bajo el agua … La plataforma de la isla que rodea Cuba es un mundo de coral, blanco, dorado y único. Era brillante, suave, lleno de vitalidad, hacia ese sol deslumbrante…” Y a pesar de la soledad y la soledad y decepción del exilio, exilio, experimentó días muy buenos.

“Tenía absoluta libertad para hacer y escribir lo que quisiera, a desaparecer un mes entero sin tener que darle explicaciones a nadie” Para coger un coche y viajar a cualquier parte. Una de mis grandes aventuras compartida con mis amigos fue conducir por todos los EEUU, donde por primera vez pudimos disfrutar de la sensación de libertad y la emoción de la aventura sin sentirnos perseguidos. En fin, el placer de estar vivo”.

Al final de Antes que anochezca, que el escrito cubano terminó poco antes de morir, escribe, Arenas escribe acerca de que soñaba “volando por encima de las palmeras, era fácil, solo tenía que creer que podías hacerlo. Pronto volaba sobre la Quinta Avenida de Miramar, sobre las palmas reales que bordean la calle, el paisaje era hermoso a la vista, mientras que yo, alegre y radiante, volaba por encima de ella, sobre las copas de las palmeras. “

Me gusta pensar en Arenas nadando en el ancho mar azul, conduciendo por todas partes de los vastos espacios abiertos de los EEUU, volando sobre las palmas reales en Miramar, donde los largos años de exilio y la alienación se quedan en un recuerdo lejano mientras el escritor cubano regresa al final a su amada Cuba.

 

Traducido y basado en un artículo del Huffington post en el que la escritora Ann Tashi Slater habla acerca de su entrevista con el escritor cubano en año 2013. link: http://www.huffingtonpost.com/ann-tashi-slater/on-exile-and-the-longing-_b_4451017.html

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